Se cumplen 210 años de la Revolución de Mayo. Aquella donde surgió bajo estas tierras el primer grito de libertad.
Recuerdo aquel 25 de mayo de 2010, donde millones de personas tomaron las calles en unidad bajo el sueño de una República Argentina unida, soberana y en libertad. Ojala que eso pronto se repita. La revolución de Mayo corría en nuestras sangre de manera natural.
Revolución de Mayo, revolución de amor
Este 25 de mayo sueño con Argentina sin odio. Donde podamos empezar a creer que nuestro futuro puede ser distinto. Aún bajo estas terribles adversidades que nos golpean como mundo y como país. Que podamos volver a soñar. A creer. A pensar con amor.
Sin el murmullo de los que olvidan el sol de mayo y la necesaria unidad nacional. Dejar de lado ese odio que se transforma en cáncer y nos carcome desde adentro hacia afuera tanto como individuos como sociedad. Que soñar sea algo bueno. Escuchar al otro se vuelva una costumbre. Que dejemos de menoscabar nuestras raíces y nos sintamos orgullosos de quienes somos; la celeste y blanca flameendo feliz en el cielo, sin pedir nada a nadie, más que su honesta y gloriosa libertad.
Que el amor y la unidad nos revistan de esperanza en estos 210 años de la Revolución.