El gol más triste de la historia de Chile tuvo lugar en 1973 cuando la selección trasandina tuvo que enfrentar a la Unión Soviética en un repechaje para Alemania ’74 que nunca se jugó pero que la dictadura de Pinochet se encargó de tapar.
El repechaje citaba a la selección de Chile se programaba entonces para el 26 de septiembre de 1973, en Estadio Lenin de Moscú.
Lo cierto es que Chile vivía una de las dictaduras más sangrientas de la historia de latinoamérica y uno de los momentos más oscuros de su historia.
El 11 de septiembre de 1973, Augusto Pinochet realizaba un Golpe de Estado bombardeando la Casa de Gobierno y destruyendo el mandato democrático y la vida del presidente Salvador Allende. Así, imponía una de las dictaduras más crueles y sangrientas de la historia.
Esa mañana, los bombardeos caían sobre Chile y Allende moría defendiendo el honor de su mandato popular, mientras la selección chilena debía presentarse en el campo de entrenamiento para ultimar detalles con vistas a la visita a Moscú. Esa práctica jamás llegó a realizarse.
Durante el gobierno socialista de Salvador Allende, Chile mantenía estrechas relaciones con la Unión Soviética. Pero tras el Golpe de Estado de Pinochet -y su dictadura apoyada desde los Estados Unidos- se rompieron las relaciones diplomáticas con Chile. El Kremlin ordenó a su personal diplomático que regresara al país y decretó el cierre de la embajada chilena en Moscú.
A pesar del golpe, el partido entre URRS y Chile para jugar el mundial de Alemania 1974, seguía vigente. Tras idas y vueltas, la selección consiguió poder viajar pero fueron amenazados de manera directa: “Si hablan, sus familias sufrirán las consecuencias”. Así, viajaron hasta Moscú donde empataron 0 a 0 el 26 de septiembre de 1973. Así, la revancha se pactaría para el 21 de noviembre en el Estadio Nacional de Santiago.
Sin embargo, en dicho Estadio, la dictadura pinochetista había instalado campos de detención, tortura y exterminio que las personas de Chile desconocían por complicidad y/o censura de los distintos medios. El gobierno de Pinochet quería que la revancha debía jugarse en el Nacional, para mostrarle al mundo una cara pacífica de Chile.
Los cierto es que la FIFA fue a inspeccionar el Estadio previo al encuentro ante las denuncias y rumores que circulaban al respecto a nivel mundial. No vieron nada, supuestamente. O quizás fueron cómplices. Eso es algo dificil de determinar. Lo cierto es que dieron el OK para que el partido se juegue.
Augusto José Ramón Pinochet Ugarte (Valparaíso, 25 de noviembre de 1915-Santiago, 10 de diciembre de 2006) fue un militar y político chileno, responsable de una de las dictaduras más crueles y largas de la historia mundial. Aquella abarco el período comprendido entre 1973 y 1990. Paradójicamente, al finalizar la dictadura, fue Comandante en jefe del Ejército de Chile (23 de agosto de 1973-10 de marzo de 1998) y Senador (durante el período que barca 11 de marzo de 1998-4 de julio de 2002).A pesar de su corta detención en Londres, murió impune como la mayoría de los genocidas que azotaron el continente durante el denominado «Plan Condor».
A pesar de ello, los soviéticos se negaron a viajar a Chile en un claro acto de repudio al régimen de Pinochet.
La Federación de Fútbol de la Unión Soviética divulgaba el siguiente comunicado:
“por consideraciones morales los deportistas soviéticos no pueden en este momento jugar en el estadio de Santiago, salpicado con la sangre de los patriotas chilenos (…) La Unión Soviética hace una resuelta protesta y declara que en las actuales condiciones, cuando la FIFA, obrando contra los dictados del sentido común, permite que los reaccionarios chilenos le lleven de la mano, tiene que negarse a participar en el partido de eliminación en suelo chileno y responsabiliza por el hecho a la administración de la FIFA”
A pesar de ello, en Chile todo se montaba con total normalidad y el partido «debía disputarse». A tal punto que, a pesar de que la URSS no se hizo presente, el Estadio estaba repleto, lo carabineros tocaron el himno nacional. Todo bajo «la normalidad» de una cruel dictadura. El 21 de noviembre de 1973, Francisco «el Chamaco» Valdés convirtió el gol de la parodía. El gol de la hipocresía. El gol más triste de la historia de Chile. Un gol que mostraba la supuesta normalidad, pero que ocultaba una de las más sangrientas dictaduras de la historia mundial. Como una vez dijo Queen, «El show debe continuar».
Fuente: Agencia API / FIFA /
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