HISTORICO En el año 2020, el consumo de carne vacuna en Argentina fue el más bajo en un siglo, 100 años.
En medio de la pandemia, el incremento de la pobreza y todas las dificultades estructurales que Argentina enfrenta producto del peor gobierno de la historia -el de Macri– y los problemas estructurales que el país acarrea desde antes. En ese contexto, uno esperaba que la solidaridad sea parte de la solución. Sin embargo, la realidad dejó en evidencia otra cosa.
Es que el texto es por de más descriptivo: «el consumo de carne vacuna en Argentina fue el más bajo en 100 años». Es más, el aumento del precio del alimento superó a la inflación casi en un 300%. Una locura.
Los argentinos comieron menos carne pero la faena creció para la exportación.
El consumo de carne vacuna por habitante cerró 2020 en 49,7 kilos anual, pese a que la faena de animales creció 0,6% interanual hasta las 14 millones de cabezas, el mayor volumen en más de una década.
El consumo de carne vacuna por habitante cerró 2020 en 49,7 kilos anual, el nivel más bajo del último siglo, pese a que la faena de animales creció 0,6% interanual hasta las 14 millones de cabezas, el mayor volumen en más de una década, informó este jueves la Cámara de la Industria y Comercio de las Carnes (Ciccra).
En su informe de diciembre, la entidad empresaria señaló que en nivel de consumo por habitante registrado el año pasado, «constituyó en el guarismo más bajo de los últimos cien años, teniendo en cuenta las cifras provisorias de faena y exportaciones correspondientes al segundo semestre de 2020».
De esta manera, los 49,7 kilos por persona registrados en 2020 solo quedan por encima de las cifras de 1920, cuando el promedio fue de 46,9 kilos por habitante.
Asimismo, el consumo por persona del año pasado quedó 2,3% por debajo del registro de 2019.
Esta baja en el consumo de carne se dio pese a que en 2020 se verificó la mayor faena de los últimos 11 años, con un volumen de 14 millones de cabezas.
La entidad precisó que la faena no fue pareja a lo largo del año, ya que en los dos primeros trimestres marcó una mejora, con crecimientos de entre 3,6% y 5,6% en cada uno de ellos; mientras que en el últimos semestre reflejó caídas de entre 2,6% y 3,3% respecto a igual período de 2019.
En este contexto, la producción de carne subió en la comparación interanual 1,3% hasta las 3,17 millones de toneladas, de las cuales 2,25 millones de toneladas tuvieron como destino el mercado interno.
La exportación, por su parte, representó el 28,9% de la producción total carne, con un volumen récord proyectado de 917.200 toneladas.
Por último, en lo que respecta a los precios de la carne en góndola, la entidad señaló que en diciembre se produjo una suba de 20% respecto a noviembre y a lo largo del año acumuló un incremento de 78%.
Fuente: TELAM
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